Un funeral sin flores
Un funeral sin flores
"El hombre es en verdad el rey de todos los animales, pues su crueldad sobrepasa a la de estos. Vivimos de la muerte de otros. ¡Somos tumbas andantes!" - Leonardo Da Vinci
(Foto: Tania Pilz)
¿Cuándo fue la
última vez que
viste una abeja? Sí, esos pequeños insectos que tienen el trasero con
rayas
negras y amarillas. Esos pequeños seres que son los responsables de que
los humanos tengamos flores, frutas frescas y comida sobre la mesa.
A veces pareciera que los humanos
estamos programados para ignorar y prestar poca atención a las cosas pequeñas
que rodean nuestra vida diaria. Y lo entiendo, hemos construido una sociedad
que demanda enfoque en muchas cosas, más que todo el trabajo, la casa, el tráfico,
llegar a tiempo a nuestras citas de negocios, sacar buenas notas, satisfacer a
la familia, quejarnos de los políticos que nosotros mismos elegimos, contar lo
que nos queda de nuestro sueldo para llegar a fin de mes y pagar las cuentas.
Son muy pocas las veces que paramos a respirar, a estar lejos de todo lo
construido por la mano de los seres humanos y simplemente regresar a estar en
contacto con la naturaleza. Son tan pocas veces que paramos de correr y
observamos y percibimos las cosas pequeñas que hacen que este planeta siga
girando y que la vida sea posible, especialmente esa vida cómoda que hemos construido.
Regresando al principio de este
texto, ¿Cuándo fue la última vez que viste una abeja? ¿Conoces la importancia
que tienen para nuestra vida y para la existencia de la mayoría de plantas y
otros seres vivos sobre el planeta? ¿Sabías que Albert Einstein dijo que si las
abejas desaparecían, también lo iba a hacer la raza humana? Es más, él
solamente nos daba cuatro años de vida, si ellas desaparecían.
Según “El Declive de la abejas”
de Greenpeace hubo un 25% de reducción en la población de abejas en Europa entre 1985 a
2005. Lo que quiere decir que según este documento, el problema no es nuevo, lo
nuevo es la preocupación de las personas y los medios. Tenemos que aceptar que
generalmente cuando vemos la punta del iceberg no nos preocupamos, pero cuando
nuestro barco se hunde porque no conocíamos lo que había debajo del agua, ahí
sí queremos rescatarlo y regresar el tiempo para poner más atención a las
pequeñas cosas que nos rodean y que prácticamente construyen nuestra vida.
Sin abejas muchas de las frutas
que incluimos en nuestra dieta, muchas flores que conocemos y usamos de ornamentación
desaparecerían del planeta y si crees que a ti no te preocupa porque de todos
modos consumes más carne que verduras y frutas, pues te comento que el animal
que te comes si lo hace y por lo tanto, desaparecía también. Y olvidémonos de
la miel.
Muchas veces me han dicho que si
a las personas no les toco el bolsillo y no les hago ver las pérdidas
económicas que van a tener, jamás voltearan a verme y todo lo que les pueda
contar, les saldrá por el otro oído. Según la Organización para la Agricultura y
la Alimentación de las Naciones Unidas (FAO) existen 100 especies de cultivos
que proporcionan el 90% de los alimentos en todo el mundo, 71 de ellos se
polinizan gracias a las abejas. Lo que quiere decir que si estos pequeños
seres desaparecen, a todos esos que les gusta contar dinero, les faltarán unos
cuantos y a nosotros nos faltará comida para alimentarnos.
No sé si hasta ahora hemos
notado la conexión que hay de todo lo que pasa en el mundo por más pequeño que
sea, con TODO lo que va a pasar o ya está pasando. Si algo tan pequeño que
antes no notábamos que nos rodeaba con más frecuencia desaparece, la producción
de alimentos bajará y por lo tanto los precios de lo que está por acabarse
subirán, así como el precio de los demás productos, lo que quiere decir que
solamente un grupo bastante reducido tendrá acceso a alimentos,
lo que nos llevará a la muerte de la mayoría. Sí, es un poco pesimista esta
visión, pero no falsa.
¿Cuántos han visto esas películas
en donde cuentan el fin del mundo? Las más comunes es por un virus que contagia
a toda la población del mundo y que son muy pocos los que quedan al final de la
película, ahora a este drama agreguémos una variable que es la falta de
alimentos, porque antes de que nos invada un virus mortal, ya nos acabamos a
las abejas y la falta de ciertos alimentos han provocado que nuestras defensas bajen,
por lo que estamos más expuestos a las enfermedades. Suena como una buena
película un poco exagerada, pero lo que pretendo dar a entender son aquellas
conexiones que estamos olvidando por no cuidar a estos animales que desde hace
ya unos años se han venido extinguiendo.
¿Las causas? Hay muchas teorías y
dentro de las más mencionadas: pesticidas, parásito que enferman a las abejas y
el cambio climático.
Puede ser que dentro de estas
teorías haya una que esté fuera de nuestro alcance o en dónde no seamos la razón
principal, quien sabe, no lo sé…puede ser que hasta la evolución de los
parásitos sea a causa del cambio climático en donde sí jugamos un papel
importante. No sé, son solamente ideas que se me han venido por el momento a la
cabeza. Lo que sí sé es que no podemos seguir ignorando la importancia de estos
pequeños animales y que está en nosotros el informarnos e informar a los que
podamos de cómo cuidar de ellas o cómo no contribuir con su desaparición.
¿Se imaginan cómo sería un
funeral sin flores?
- Mar
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